A partir de septiembre de 2023, México se sumará a los países que han prohibido el uso de las grasas trans en los aceites, grasas comestibles, alimentos y bebidas no alcohólicas que se venden en el mercado.
Esta medida se debe a una reforma en la Ley General de Salud que busca proteger la salud de los mexicanos y prevenir enfermedades cardiovasculares relacionadas con el consumo de estas sustancias. Las grasas trans son un tipo de grasa que se forma al añadir hidrógeno a los aceites vegetales líquidos para hacerlos más sólidos y duraderos.
Se utilizan principalmente en alimentos fritos, empaquetados y procesados, como papas fritas, margarinas, galletas, pasteles y otros productos de repostería. Sin embargo, su ingesta aumenta el colesterol malo en la sangre y reduce el bueno, lo que incrementa el riesgo de sufrir infartos, derrames cerebrales y otras complicaciones.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las grasas trans son responsables de la muerte de más de 13.000 mexicanos y 500.000 personas en el mundo cada año. La OMS recomienda eliminar por completo las grasas trans de producción industrial de la dieta y limitar su consumo a menos del 1% de las calorías totales. El decreto aprobado por el Congreso mexicano establece que los productos que contengan grasas trans añadidas durante su elaboración industrial no podrán comercializarse en el país. Además, fija un límite máximo del 2% del contenido total de ácidos grasos para los productos que contengan grasas trans de origen natural, como algunos derivados animales. Las empresas que incumplan esta norma podrán ser sancionadas con multas, clausuras o decomisos.
La reforma entrará en vigor 90 días después de su publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF), lo que ocurrirá en la segunda semana de septiembre. Con esta acción, México se alinea con las directrices de la ONU y se equipara con regiones como la Unión Europea, que ya han restringido o eliminado las grasas trans de sus mercados. La OMS ha felicitado a México por este avance en beneficio de la salud y ha instado a otros países a seguir su ejemplo.