Las películas biodegradables en alimentos son materiales que se pueden usar como envases o recubrimientos para proteger y conservar los alimentos, y que además se pueden degradar por la acción de microorganismos en el medio ambiente.
Estas películas se elaboran a partir de polímeros naturales, como almidón, proteínas, lípidos, celulosa y otros polisacáridos.
Algunas ventajas de las películas biodegradables son:
- Mejoran la seguridad alimentaria, al reducir o eliminar la contaminación microbiana y evitar la transmisión de enfermedades transmitidas por los alimentos.
- Mejoran la calidad organoléptica y nutricional, al evitar el uso de altas temperaturas que pueden provocar cambios indeseados en el sabor, el color, el aroma y el valor nutritivo de los alimentos.
- Aumentan la vida útil y la frescura, al retardar el deterioro y la oxidación de los alimentos.
- Reducen el impacto ambiental, al disminuir el consumo de agua, energía y productos químicos, y al generar menos residuos plásticos.
Las películas biodegradables en alimentos se pueden aplicar a diversos productos, como frutas, verduras, carnes, pescados, quesos, etc.
Algunos ejemplos de películas biodegradables son:
- Películas basadas en almidón: se obtienen a partir del almidón extraído de diferentes fuentes vegetales, como maíz, papa, trigo, arroz, etc. Estas películas tienen buena resistencia mecánica y baja permeabilidad al oxígeno, pero son sensibles a la humedad y tienden a retrogradarse.
- Películas basadas en proteínas: se obtienen a partir de proteínas extraídas de diferentes fuentes animales o vegetales, como leche, huevo, soja, gluten, gelatina, etc. Estas películas tienen buena resistencia mecánica y buena adherencia a los alimentos, pero son permeables al vapor de agua y al oxígeno.
- Películas basadas en lípidos: se obtienen a partir de lípidos extraídos de diferentes fuentes animales o vegetales, como cera de abejas, manteca de cacao, aceite de girasol, etc. Estas películas tienen baja permeabilidad al vapor de agua y al oxígeno, pero son quebradizas y sensibles a la temperatura.
Para mejorar las propiedades de las películas biodegradables en alimentos se pueden mezclar diferentes polímeros o adicionar otros componentes, como plastificantes, antioxidantes, antimicrobianos, colorantes, aromatizantes, etc.