La silimarina es un compuesto natural que se extrae de las semillas del cardo mariano, una planta medicinal que se ha usado desde la antigüedad para tratar diversas afecciones del hígado y la digestión.
La silimarina tiene propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, hepatoprotectoras y regeneradoras, que la hacen muy beneficiosa para la salud hepática y general.
Algunos de los beneficios y propiedades de la silimarina:
- Protege y repara las células del hígado de los daños causados por sustancias tóxicas, como el alcohol, los medicamentos, los metales pesados o los virus. La silimarina evita que estas sustancias se absorban en el hígado y estimula la producción de nuevas células sanas.
- Ayuda a prevenir y tratar enfermedades hepáticas como la cirrosis, la hepatitis, el hígado graso o la ictericia. La silimarina mejora la función hepática, reduce la inflamación, combate el estrés oxidativo y favorece la eliminación de bilis.
- Mejora la digestión y alivia los trastornos gastrointestinales como la indigestión, el reflujo, el estreñimiento o las hemorroides. La silimarina estimula la secreción de jugos gástricos y enzimas digestivas, facilita el tránsito intestinal y reduce la presión venosa en el recto.
- Contribuye a reducir los niveles de colesterol y glucosa en sangre, lo que previene el riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes. La silimarina modula el metabolismo de los lípidos y la glucosa, aumenta la sensibilidad a la insulina y previene la formación de placas de ateroma.
- Fortalece el sistema inmunológico y ayuda a combatir las infecciones. La silimarina potencia la actividad de los glóbulos blancos, que son las células encargadas de defender al organismo de los agentes patógenos. Además, tiene un efecto antibacteriano y antiviral.
- Retrasa el envejecimiento celular y mejora el aspecto de la piel. La silimarina neutraliza los radicales libres, que son moléculas que dañan las células y provocan el deterioro de los tejidos. Así, previene las arrugas, las manchas, la flacidez y otras alteraciones cutáneas como el acné, la psoriasis o el eczema.
¿Como se utiliza la silimarina?
La silimarina se puede consumir en forma de cápsulas o comprimidos, que se pueden encontrar en farmacias o herbolarios. También se puede preparar una infusión con las semillas del cardo mariano, que se deben triturar previamente. La dosis recomendada varía según el caso, pero generalmente se aconseja tomar entre 140 y 300 mg al día, repartidos en tres tomas antes de las comidas.
Contraindicaciones
La silimarina es un producto natural que tiene pocos efectos secundarios y contraindicaciones. Sin embargo, puede causar molestias digestivas, alergias o interacciones con algunos medicamentos. Por eso, es importante consultar con un médico antes de tomarla, especialmente si se padece alguna enfermedad crónica o se está embarazada o lactando.