Recubrimientos comestibles: una tecnología natural y sostenible.

Esta tecnología consiste en la aplicación de una película comestible delgada que recubre o separa los componentes del alimento, creando una barrera entre el alimento y la atmósfera que lo rodea. El objetivo es mejorar la seguridad, la calidad, la vida útil y el aspecto de los alimentos, sin afectar su valor nutricional ni su sabor.

Los recubrimientos comestibles se elaboran a partir de sustancias naturales, como polisacáridos, proteínas, lípidos o ceras, que se disuelven o dispersan en un solvente, como agua o etanol. A esta solución se le pueden añadir otros ingredientes, como plastificantes, antioxidantes, antimicrobianos, colorantes o aromatizantes, para mejorar las propiedades y la funcionalidad de los recubrimientos.

Los recubrimientos comestibles se pueden aplicar a diferentes tipos de alimentos, como frutas, verduras, carnes, pescados, quesos, pasteles, etc. El método de aplicación depende del tipo de alimento y del tipo de recubrimiento. Algunos métodos son: inmersión, pulverización, pincelado o laminado.

Los recubrimientos comestibles tienen varias ventajas sobre los envases convencionales:

• Son biodegradables y ecológicos, al reducir el consumo de recursos y la generación de residuos plásticos.
• Son comestibles y seguros, al no contener sustancias tóxicas ni alérgenos.
• Son versátiles y personalizables, al poder adaptarse a las características y necesidades de cada alimento.
• Son económicos y accesibles, al utilizar materias primas abundantes y baratas.

Los recubrimientos comestibles son una tecnología que tiene muchas aplicaciones y beneficios para la industria alimentaria y los consumidores.

Algunos aspectos que se pueden añadir son:

• Los recubrimientos comestibles pueden mejorar el aspecto visual de los alimentos, al proporcionarles brillo, color y forma. Por ejemplo, se pueden usar recubrimientos comestibles con colorantes naturales para darle un tono rojo a las fresas, o con cera de abejas para darle un aspecto brillante a las manzanas.
• Los recubrimientos comestibles pueden servir como vehículos para la incorporación de ingredientes funcionales, como antioxidantes, probióticos, vitaminas, minerales, etc. Estos ingredientes pueden aportar beneficios para la salud de los consumidores, como prevenir el envejecimiento celular, mejorar la flora intestinal, fortalecer el sistema inmunológico, etc.
• Los recubrimientos comestibles pueden reducir el uso de aditivos sintéticos en los alimentos, como conservantes, estabilizantes, espesantes, etc. Estos aditivos pueden tener efectos adversos para la salud de los consumidores, como alergias, intolerancias, toxicidad, etc. Los recubrimientos comestibles son una alternativa natural y segura que puede reemplazar o disminuir el uso de estos aditivos.